La Corte Federal de Australia suspendió provisoriamente el proceso por el cual el Estado ruso reclama a un privado los derechos sobre la marca de la vodka.
La famosa vodka rusa Stolichnaya perteneció a la empresa estatal VO Sojuzplodoimport hasta la disolución de la Unión Soviética en 1991. Desde ese momento la propiedad sobre la marca registrada de la vodka ha sido objeto de disputa en diversos países.
SPI Group, basada en Luxemburgo y perteneciente al billonario ruso Yuri Shefler, sostiene que en 1997 adquirió una empresa privada que poseía las marcas de varias históricas bebidas rusas, entre ellas Stolichnaya. Por otro lado la Federal Treasury Enterprise Sojuzplodoimport (FTE), una empresa estatal rusa, dice que tras la disolución de la Unión Soviética el gobierno de Rusia le asignó los derechos de marca para Stolichnaya.
En esos países FTE ha demandado a SPI Group por apropiación indebida de la marca registrada Stolichnaya, siguiendo una orden del año 2000 del presidente ruso Vladimir Putin, quien ordenó la "restauración" de las marcas comerciales de Stolichnaya al Estado e instruyó a altos jerarcas del gobierno a proporcionar informes mensuales sobre tales esfuerzos. La FTE argumenta que recibió los derechos sobre la marca de una entidad llamada FKP, pero SPI Group se defiende al afirmar que FKP no existió hasta el 2001.
En Australia desde hace trece años la FTE lleva adelante la demanda contra SPI Group y el pasado 20 de noviembre la Corte Federal de Australia dio, según su propia definición, un "paso excepcional" en el caso: suspendió provisoriamente el proceso al confirmar que la Federación de Rusia, y no la FTE, es el "demandante real" del caso y como tal está obligada a presentar documentos que ha retenido durante años. Si la Federación Rusa no presenta esos documentos para el 30 de noviembre de 2018, SPI Group podrá solicitar formalmente que la demanda sea desestimada.
Entre los documentos requeridos por la Justicia australiana se encuentran los informes mensuales solicitados por Putin, documentos que fueron incautados por agentes del gobierno ruso en múltiples redadas a las instalaciones de SPI en Moscú y "archivos secretos" que guarda el Ministerio de Desarrollo Económico y Comercio de Rusia.
Es necesario que las entidades públicas actúen dentro del marco de la ley y eviten imponer cargas económicas sin sustento normativo, especialmente cuando se trata de cumplir mandatos judiciales.
A menudo mal entendido, este requisito plantea importantes desafíos para los solicitantes internacionales. Ya sea en la etapa de registro, mantenimiento o ejecución, los estándares legales que rigen el uso de marcas exigen precisión, coherencia y por sobre todo rigor probatorio.
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